Sueño (PoemaNrº5)
Una voraz muerte acecha en el cielo,
es el peso.
De mi anhelo surgen vientos de victorias,
victorias ensangrentadas en lo profundo de mi mente, dicen: lo que añoro, una voraz muerte venida desde nuestro cariño.
Y pienso en el futuro, humilde servidor del hombre, y
a la vez, gigante eterno que estremece con sus fauces, el amanecer.
La muerte es el destino.
II
Y de ahí te pronuncio las canciones en los mismos lugares,
vivo a tu lado en la Luna y sacudo tu melena en los ocasos soñados.
Y como humano, muevo mi cuerpo a través del ojo del destino, no sobrevivo.
No porque te haya amado, sino, porque te amé y me vi perdido, en aquella muerte que venía desde el cielo, que era mío y tuyo, en las fauces de nuestro paupérrimo Destino.
a la vez, gigante eterno que estremece con sus fauces, el amanecer.
La muerte es el destino.
II
Y de ahí te pronuncio las canciones en los mismos lugares,
vivo a tu lado en la Luna y sacudo tu melena en los ocasos soñados.
Y como humano, muevo mi cuerpo a través del ojo del destino, no sobrevivo.
No porque te haya amado, sino, porque te amé y me vi perdido, en aquella muerte que venía desde el cielo, que era mío y tuyo, en las fauces de nuestro paupérrimo Destino.
Comentarios
Publicar un comentario